Pero ya sabemos que para gustos están los colores por lo que el problema viene cuando se quiere decorar, pues en cierta manera, ese espacio lo definirá su decoración. Por lo tanto vamos a daros algunos de los ejemplos más habituales en decoración de pérgolas para que os inspiren en conseguir vuestra pérgola de ensueño.
Pérgolas con luces:
Las pérgolas de madera no solo se disfrutan de día. De noche pueden convertirse en un ambiente romántico perfecto para una cena de a dos o para celebrar una ocasión especial con los amigos. Las luces aportarán un ambiente más cálido y acogedor, sobre todo si se opta por tonos de luz amarillos, y sinceramente, "notaréis que nadie querrá irse".
Si lo que queréis es dar un toque festivo, unos farolitos chinos o banderines de colores serán perfectos para conseguirlo!!
Pérgolas románticas o estilo ibicenco:
Como ya te contamos, las pérgolas pueden adaptarse a cualquier proyecto, pero sobre todo, se caracterizan por ofrecer una sensación de intimidad única. Si quierés darle un giro romántico a esta estructura de madera, una gran idea es complementarla con cortinas blancas. Existen telas livianas diseñadas especialmente para exteriores, aunque claro, requieren ciertos cuidados. Sin embargo, un buen par de cortinas blancas aportarán frescura y romanticismo; y pueden transformar cualquier pérgola en el escenario perfecto para un encuentro mágico con tu pareja.
Este tipo de pérgolas se caracterizan por su esencia campestre y de relax. Generalmente, están hechas a partir de elementos rústicos que aún conservan algún aspecto de sus formas naturales, como por ejemplo, las pérgolas de troncos o aquellos modelos con techos de caña. Este tipo de pérgolas se ajustan a cualquier ambiente, ya sea una pequeña terraza o un amplio jardín, y combinan perfecto con el follaje silvestre. Por eso, decorarlas con macetas colgantes o con enredaderas puede ser una combinación perfecta. Las pérgolas rústicas combinan muy bien con los muebles gruesos de maderas robustas o las telas artesanales y aportan un “aire de campo” que puede resultar funcional incluso en viviendas urbanas.
Las pérgolas de jardín modernas implican un ambiente ideal para un almuerzo en familia resguardado del calor. Los techos hechos con varillas y toldos de tela, placas de policarbonato o chapas transparentes, imprimen un toque moderno, pero al mismo tiempo, elegante y sofisticado. Y sobre todo, combinan muy bien con cualquier tipo de mueble que elijas, como los de hierro, por ejemplo.
Pérgolas de colores:
Si optas porque el color juegue un papel fundamental en tu exterior, pintar tu pérgola de un tono que destaque hará que este elemento arquitectónico contraste contra el verde del pasto, el color de las flores y se destaque aún más en el paisaje. Una pérgola pintada siempre es un complemento
colorido, divertido, original que nos aportará una estética vintage.
Si aún no lo tienes claro, vamos con algunas imágenes inspiradoras, ¡para todos los gustos!
FUENTE:proyectoenmadera.com.ar/
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